¿Qué es el duelo?
La palabra duelo procede del latín “dolus”, que significa dolor. Esto es significativo, porque el dolor es un aspecto fundamental en este proceso.
Si no implica dolor, sabemos que no es duelo. Casi todas las reacciones frente al dolor son adaptativas y la forma que adopta el dolor en cada persona puede variar significativamente.
Existe una creencia muy extendida, según la cual el duelo dura un año y todo aquel proceso que dure más se considera que tiene tintes patológicos. Pero, en realidad, no existe un plazo concreto para elaborar el duelo, cada persona requiere de diferentes tiempos, de modo que enmarcar el duelo en un periodo exacto solo sirve para añadir presión al proceso.
Más que el tiempo que dura, es importante transmitir a la persona en duelo, que su función debe ser activa y adaptativa para atravesar cada pensamiento, y emoción que se presente en el camino.
De allí que dejar el dolor al paso del tiempo desprotege a la persona en duelo y lo deja sin recursos ni opciones para manejar el proceso, ya que solo se limita a esperar.
Duelo adaptativo vs. no adaptativo
Duelo no adaptativo
Duelo adaptativo
De regreso
El morir como parte de la vida