Conmemoración a la Dra. Ruth Niño
Más que médico de profesión fue un ser humano que entregó su vida al servicio de los demás
Honramos su luz, su legado y su vida
Su peculiar forma de ser, que enmarco gran parte de la historia de esta familia. 13 años de una vocación de servicio que lucía con brillo en sus ojos y una sonrisa sincera.
Siempre llevaba un curioso afán, queriendo cumplir cada reto, desafío y hacer parte de las iniciativas que otros presentaban.
Sus pacientes sentían mucha tranquilidad en cada visita, pues sus consultas eran minuciosas, revisando hasta la mínima esquina del cuerpo de cada uno para no dejar pasar detalles; esto sin olvidar su dulzura y calidez.
Dentro del registro de sus valoraciones le parecía importante relatar a su modo hasta el entorno del paciente, porque consideraba el mundo de cada uno como un todo, leerlos era como leer una interesante historia.
Tenía una fobia especial por los perros, quienes compartieron más de cerca con ella, pueden afirmar que se subía en sillas y huía con cierto temor, sin importar el tamaño de la mascota.
En un concurso de talentos, nos dejó claro su gusto por la naturaleza, los atardeceres y amaneceres la impactaban, como si no hubiera visto una puesta de sol el día anterior. Aseguró que algunas veces debía detenerse en el camino para tomar una buena foto.
Amor, alegría y esperanza son palabras que la describen perfectamente.
Sabemos que nos acompaña con la lealtad e incondicionalidad que siempre la caracterizaron desde donde esté.
Ella ocupa un lugar maravilloso en los corazones de cada una de las personas que la conocieron.